CRONICA DE UNA CONDENA ANUNCIADA Y CELEBRADA.
.....Y SI SE CAEN LAS VIGAS Y "TUMBA LA MULA A GENARO"?
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) visitará nuestro país en los próximos días atendiendo a una invitación del gobierno dominicano, en un vano intento por cambiar la decisión del Tribunal Constitucional que mediante una sentencia histórica y nacionalista inició el proceso de solución al problema de centenares de miles de haitianos residentes en la república, que tratan de naturalizarse como dominicanos sin poseer ningún tipo de documentación, ni de su país de origen y mucho menos del nuestro.
El presidente de la Comisión, José de Jesús Orozco, explicó en rueda de prensa que "la CIDH aceptó la invitación de República Dominicana para visitar el país, requisito indispensable para que los comisionados puedan viajar de manera oficial, pero insistió en su carácter urgente".
"La Comisión aspira a que su visita tenga un efecto práctico y concreto, por eso es imprescindible hacerlo a la mayor brevedad. Como saben, la CIDH necesita de la anuencia de los estados para visitarlos, en este caso ya lo ha manifestado así públicamente el Gobierno de República Dominicana y lo valoramos mucho", dijo.
UNA CONDENA ANUNCIADA..... La Comisión viene a cumplir un propósito acariciado durante mucho tiempo: obligar a nuestro país a aceptar como dominicanos y documentar como tales, a centenares de miles de haitianos abandonados a su suerte por un conjunto de países que después de explotarlos, expoliarlos y sumirlos en la miseria, se niegan a cumplir con la promesa de ayudarles a salir de la pobreza, dejando a república dominicana una carga muy pesada para sus escasos recursos financieros.
Quien dude del papel a jugar por la Comisión, que lea detenidamente las declaraciones de los miembros del Comité de Solidaridad con las Personas Desnacionalizadas encabezados por Juan Bolivar Diaz, Huchi Lora y otros "dominicanos", citamos:
"A nadie debe escapar la perspectiva en que se coloca a la nación dominicana de espaldas a principios y cuestiones básicas y sensibles de la convivencia universal marcada por los movimientos migratorios, lo que expone a condenas internacionales ya anticipadas por la Comision Interamericana de los Derechos Humanos y por la jurisprudencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos". Fin de la cita.
Es decir que la Comisión ya en otras ocasiones nos ha condenado por razones similares a las establecidas en la Sentencia y en otras basadas en las mentiras y calumnias levantadas por los "patriotas" amigos de los haitianos.
Es decir que la condena al país, no solo es un evento anunciado, sino esperado con ansia porque hasta ahora el Comité ha sido derrotado en las ONU, la UE, la OEA, Venezuela, España, Cuba y un largo etc.
PERO, los miembros de la Comisión tendrán que oír muchas voces "contestatarias" y si se movilizan por nuestras calles, observaran a miles de ciudadanos haitianos trabajando, conviviendo, "bebiendo romo y cervezas" junto a dominicanos, que nunca los han "asquerosiados" y que son tratados como seres humanos a quienes nunca les ha faltado la solidaridad y el calor humano. Y si acaso pasan por el Pequeño Haiti, pensarán que están en un barrio no muy pobre, de la capital haitiana.
Sin embargo son altisimas las probabilidades de que los miembros de la Comisión nos condenen, "a pesar de los pesares". Pero como la verdad al final termina aflorando, no descartamos que al Comité de Solidaridad con las Personas Desnacionalizadas, les pase como a Genaro y a su Mula Mansa y Consentida y en coro digamos "Y Tumbó la Mula a Genaro".........
Esta frase popular la oía con frecuencia en la comunidad de Comendador y se usaba cuando ocurría algún acontecimiento que por lo inusual sorprendía a los pobladores de esa lejana comunidad de la frontera sur.
Pregunté por el origen de la expresión y la respuesta fue la siguiente:
Un señor llamado Genaro tenia una mula mansa, tan mansa que su dueño solía montarla por cualquier lado, dormirse sobre su lomo y hasta tomar sus patas traseras para curarle cualquier lesión o sacarlas espinas, sin provocar ninguna reacción violenta de la mula. Los amigos siempre advertían a Genaro de la peligrosidad de estas acciones, porque "uno no puede confiar en las mulas, porque siempre estan al acecho, esperando una oportunidad".
Un dia simple y llanamente la mula sorpresivamente lo "etralló" yendo Genaro a parar con toda su anatomia en el duro suelo y desde ese día ante cualquier suceso inesperado la población repite la frase comentada.
De todos modos si la "Mula no tumba a Genaro" y somos condenados como todo parece indicar, entonces a coro diremos "Guerra avisada no mata soldados".
UNA CONDENA ANUNCIADA..... La Comisión viene a cumplir un propósito acariciado durante mucho tiempo: obligar a nuestro país a aceptar como dominicanos y documentar como tales, a centenares de miles de haitianos abandonados a su suerte por un conjunto de países que después de explotarlos, expoliarlos y sumirlos en la miseria, se niegan a cumplir con la promesa de ayudarles a salir de la pobreza, dejando a república dominicana una carga muy pesada para sus escasos recursos financieros.
Quien dude del papel a jugar por la Comisión, que lea detenidamente las declaraciones de los miembros del Comité de Solidaridad con las Personas Desnacionalizadas encabezados por Juan Bolivar Diaz, Huchi Lora y otros "dominicanos", citamos:
Es decir que la Comisión ya en otras ocasiones nos ha condenado por razones similares a las establecidas en la Sentencia y en otras basadas en las mentiras y calumnias levantadas por los "patriotas" amigos de los haitianos.
Es decir que la condena al país, no solo es un evento anunciado, sino esperado con ansia porque hasta ahora el Comité ha sido derrotado en las ONU, la UE, la OEA, Venezuela, España, Cuba y un largo etc.
PERO, los miembros de la Comisión tendrán que oír muchas voces "contestatarias" y si se movilizan por nuestras calles, observaran a miles de ciudadanos haitianos trabajando, conviviendo, "bebiendo romo y cervezas" junto a dominicanos, que nunca los han "asquerosiados" y que son tratados como seres humanos a quienes nunca les ha faltado la solidaridad y el calor humano. Y si acaso pasan por el Pequeño Haiti, pensarán que están en un barrio no muy pobre, de la capital haitiana.
Esta frase popular la oía con frecuencia en la comunidad de Comendador y se usaba cuando ocurría algún acontecimiento que por lo inusual sorprendía a los pobladores de esa lejana comunidad de la frontera sur.
Pregunté por el origen de la expresión y la respuesta fue la siguiente:
Un señor llamado Genaro tenia una mula mansa, tan mansa que su dueño solía montarla por cualquier lado, dormirse sobre su lomo y hasta tomar sus patas traseras para curarle cualquier lesión o sacarlas espinas, sin provocar ninguna reacción violenta de la mula. Los amigos siempre advertían a Genaro de la peligrosidad de estas acciones, porque "uno no puede confiar en las mulas, porque siempre estan al acecho, esperando una oportunidad".
Un dia simple y llanamente la mula sorpresivamente lo "etralló" yendo Genaro a parar con toda su anatomia en el duro suelo y desde ese día ante cualquier suceso inesperado la población repite la frase comentada.
De todos modos si la "Mula no tumba a Genaro" y somos condenados como todo parece indicar, entonces a coro diremos "Guerra avisada no mata soldados".
Vendedores de flores en el sector el Pequeño Haiti en la capital dominicana. Foto tomada del blog Con Ojos Curiosos. http://conojoscuriososenrepdom.blogspot.com/ |
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