EN
LA NUEVA NOVELA DE VARGAS LLOSA, LOS ILEGALES HAITIANOS SON “LOS
PARIAS DEL CARIBE”.
Ninino,
Especial para Trapichesur.
Especial para Trapichesur.
Bueno, en la página
12B del Periódico Hoy, del Lunes 4 del mes
de noviembre de este año 2013, donde mismo escribe Juan Bolivar sus
folletones de los sábados, la dirección del matutino citado,
reproduce el texto íntegro de un artículo
de Vargas Llosa publicado en las páginas
del Periódico El Pais de España
y donde el laureado novelista repite las mismas mentiras que a diario
publica el Periódico Hoy) reflejando
la posición de las Organizaciones de la
Sociedad Civil que cumplen con las directrices pautadas por los
Estados Unidos, Francia, Canada, la Organización
de Naciones Unidas y Otros, que han decidido que el país
y pueblo dominicano carguen con los restos del fallido estado
haitiano.
Por los gritos
proferidos y el caudal de lágrimas
vertidas por esa extraña asociación, los
defensores de los intereses patrios estamos sumamente preocupados,
porque parece que la Sentencia 168-13 que en principio pretende
corregir un mal ancestral y facilitar la regularización
de centenares de miles de haitianos, que no cuentan con registros, ni
en su país de origen, ni en el nuestro, se
ha convertido en una amarga pesadilla que tiene vuelto locos y sin
ideas a todos los que reciben algunos chelitos en euros, en dólares
y hasta en gourdette, para tratar de detener la rueda de la historia,
reajustada y colocada en el carril y en las
huellas profundamente marcadas por los hombres y las mujeres que
ofrecieron su vida por legarnos un pais libre e independiente.
Una lectura
concienzuda del artículo de Vargas Llosa que no aporta ningun elemento nuevo en relacion a la referida sentencia, nos deja la misma impresión que nos
produjo la lectura de La Fiesta del Chivo: Mario no estudió
a conciencia a Trujillo y por eso en su
novela, no solo desdibuja a Trujillo, sino
a la sociedad dominicana de ese tiempo. En relación
con la Sentencia, Mario o no la ha leído,
o por solidaridad con sus amigos (o con su hijo que es funcionario de
Naciones Unidas), esta mintiendo a conciencia.
Aparentemente la Sentencia adolece de un pecado original, tal vez de un maleficio, caracterizado por una mezcla de fobia que impide a sus opositores leerla y al mismo tiempo una especie de "deseo enfermizo" de "acabar" con ella y con los que la apoyan. Será el maleficio del 13?
Bienvenido, Juan
Bolivar, no importa la cantidad de cuartillas embadurnadas de
mentiras, de verdades a medias y de la lluvia de amenazas de que nos
“caeran los palitos” de las condenas internacionales. Nada cuenta
cuando es el interés nacional el que está
en juego y los que nos proponemos defenderlo no tenemos nada que
perder.
La suerte está echada.
La suerte está echada.
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