martes, 4 de enero de 2011

Solo la población sana de haití puede salvar su nación.

"DE BUENAS INTENCIONES ESTE EMPEDRADO EL CAMINO QUE LLEVA AL INFIERNO".

La epidemia de cólera en Haití se extiende como el "Lavalas"; las aguas desbordadas del Vibrion Cholerae, avanzan junto a las protestas populares en demanda de la anulación de un espurio certamen electoral planeado, organizado, ejecutado y evaluado por la dirección del ejercito invasor de las Naciones Unidas batuteados por la armada norteamericana y la soldadesca de Canadá y Francia.

Con la liquidación de las fuerzas armadas de Haití por decision de las grandes potencias que dirigen a las Naciones Unidas y que desde la fundación de la República han arrasado con todas sus riquezas materiales y explotado a la población haitiana, primero como esclavos en la producción de caña de azúcar y luego como productores de materias primas agrícolas, sometidos a unos términos de intercambio comerciales que solo auguran hambre y miseria ancestrales para la poblacion general de ese sufrido pueblo, que no alcanza a ver la luz al final del túnel de su larga noche de tragedias, no hay ninguna institución nacional que pueda enfrentar los desafueros de la Minustah.

Cuántas víctimas han caído bajo la anarquía y el caos provocadas por las protestas populares y las balas de la MINUSTAH?.... ¿Que oscuras fuerzas de la oligarquía haitiana se han asociado a la reacción internacional, para llevar como manadas a las urnas electorales a una población diezmada por el hambre secular, las fuerzas incontrolables de los fenómenos naturales, las terribles epidemias que solo pueden provocar una mortandad mayor, por la persistencia de un orden político, económico y social excluyente, que niega a las masas populares condiciones mínimas de subsistencia y hoy, a pesar de la ayuda miltimillonaria internacional, se resisten a entregarle una infeliz vivienda donde guarecer sus miserias y un simple mendrugo de pan que le alargue su vida hasta el día siguiente?.
Fuerzas Armadas de Haiti. Eliminadas por el Ejercito Ivasor

La finalidad está tan clara como la luz del sol a mediodía en un país tropical. El único interés de los haitianos en este momento es "arañar" una ración de comida y algunas botellas de agua, con la ilusión de ver el sol del día siguiente, "huir" de la epidemia de cólera y a otras enfermedades tan graves como ésta (malaria, leptospirosis, dengue, SIDA, desaparecidas en los boletines oficiales), y la espera, la deseperante espera de ver cristalizado el sueño de la entrega de un techo que lo rescate de las destartaladas, estrechas y sucias carpas donde cursa su insostenible existencia.

La finalidad está tan clara como la luz del sol a mediodía en un país tropical de un sábado cualquiera ("por aquello de que no hay sabados sin sol, ni domingo sin resplandor"). La tragedia del pueblo haitiano movió la solidaridad de los pueblos del mundo en pro del rescate de Haití de forma tal que los capitales prometidos sobrepasaron todas las expectativas de las fuerzas aliadas. Pero a pesar del tiempo transcurrido, el inicio de los planes de la reconstrucción de Haití, brillan por su ausencia: No se han levantado las primeras viviendas, prometidas y pagadas por la ayuda humanitaria, los idificios de las Oficinas Pùblicas siguen convertidas en un montón de ruinas, y desvastadas las tierras agrietadas, esperando que el agua produzca el milagro del nacimiento de las flores y los frutos que saciarán el hambre milenaria de haití.

La finalidad está tan clara como la luz del sol a mediodía en un país tropical en un sábado cualquiera ("por aquello de que no hay sabados sin sol, ni domingo sin resplandor"): Con los centenares de miles de muertos por el terremoto, las cifras mortales incalculables de las innundaciones de la temporada ciclónica, con los miles de muertos de la epidemia del cólera, los muertos por el hambre y la desnutrición y la matanza de haitianos y haitianas en las movilizaciones por el "recuento de los votos electorales", la finalidad repito es tan clara que sorprende: MIENTRAS MAS HAITIANOS MUERTOS antes de la reconstrucción de haití, mas recursos financieros sobran para saciar la voracidad de la oligarquía haitiana y el parasitismo de las organizaciones "sin fines de lucro" que como aves de rapìña medran ante los restos cadavéricos de la población haitiana.

Solo Haití y su población salva a Haití.

A pesar de este negro panorama, esperamos que las fuerzas mas sanas de la sociedad haitiana, los continuadores de Dessalines, de Toussaint Louverture y de los héroes y mártires que orientaron la primera revolución social, de independencia y racial de américa,
se eleven y una vez enfrenten y derroten los planes de los eternos enemigos de Haití. Ellos destruyeron las fuerzas armadas para dejar inerme a la población; ellos llaman a un proceso electoral cuando no existen condiciones mínimas para que el pueblo llano seleccione un candidato que los represente. ¿Cuan de los candidatos actuales esté dispuesto a expulsar a la Minustah, a los invasores y a los centenares de parasitos que vestidos de asesores, consejeros, cientificos, pastores, obispos, defensores de los derechos humanos, consumen hata el último centavo de la ayuda solidaria de los pueblos amigos?..........

No nos llamemos a engaños. Los invasores deben plantear la salida al "toyo" planteado.

Haití.......Muchos dominicanos estamos juntos a ustedes y debemos transitar los caminos de la libertad y la democracia. Oh Haití, los enemigos son comunes...... marchemos juntos.....

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