CANUTICOS AMARGOS DE INICIO DE OTOÑO.......

VERANO CALIENTE EN LOS PREDIOS DEL BANCO CENTRAL...... Hector Valdez Albizu sabia que la población dominicana seria afectada en todo el verano por altas temperaturas por los efectos del cambio climático que afectan al mundo, como respuesta natural a las constantes agresiones que el "modernismo" y el "desarrollo industrial" provocan en la capa de ozono que rodea a la tierra..... 

Para estas temperaturas, el "dueño" (así lo bautizo Alvarito) del Banco Central, de la Junta Monetaria, del Consejo de Directores y de la Comisión de Liquidación de los Bienes de Baninter, se preparo adecuadamente......... pero no se preparo para el "calentón" que le produjo la denuncia de la estafa de Antena Latina, una empresa del estado dominicano (52%), que la Comisión de Liquidación "vendió", sin licitación, en silencio, en la oscuridad a Miguel Bonetti, Ministro Administrativo de la Presidencia del gobierno de Leonel, por US$6.5 Millones de Dólares, cuando el valor en el mercado es de US$40 Millones.

PERO...... el problema del tocayo Hector no es solo que "vendió" el 52% de las acciones de Antena Latina por una chilata, sino que solo vendió un 47% y "aparentemente" regalo a Bonetti, otro 5% de acciones del estado, para que el marchante fuera dueño de mas del 50 % de las acciones, lo que facilitaría la venta de la empresa, como efectivamente aconteció.

Algunas organizaciones están exigiendo al "dueño" del Banco Central una explicación del cambio de dueño del 7% de las acciones, movimiento desconocido no solo por el Instituto Dominicano de las Telecomunicaciones - INDOTEL-,  sino por el Senado de la república, quien debio autorizar la venta, traspaso o donacion.

El calentón de Valdez, se hace extensivo a toda la Comisión Liquidadora, a los cachanchanes del Banco, a la Junta Monetaria y desde luego al Procurador General de la República, si este robo al erario publico se queda sin la sanción correspondiente.

Que bueno que Hector Valdez, el grupito de paniaguados de la Comisión de Liquidación y hasta el mismo Bonetti, terminen en el cálido rectángulo de las celdas comunes de la cárcel de la Victoria, donde los cambios climáticos no alteran ni la temperatura, ni el "raro" comportamiento de algunos presos comunes cuyas debilidades son "probar" el diámetro de las ranuras finales del recto sigmoideo de los blanquitos de sangre azul, que caen en sus predios y son recibidos como  verdadera "carne fresca".....